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| La crisis financiera de la comuna de La Banda obliga al intendente Mirolo a demorar varios meses el pago a proveedores y a algunos empleados. |
La
municipalidad de La Banda atraviesa varias dificultades pero, por sobre todas,
la económica. El intendente Pablo Mirolo heredó un déficit que entorpece su
buena voluntad de llevar adelante una aceptable gestión. En su casi seis meses
al frente de la comuna no ha logrado establecer un equilibrio que le permita
trabajar con tranquilidad.
Todas
las semanas diversos grupos que prestan servicio en las distintas dependencias municipales
solicitan reunión urgente para preguntar a Mirolo cuándo van a cobrar,
argumentando que “llevan varios meses sin ver un peso”.
Sin
embargo, lo más grave de esta situación es que a menudo se escucha decir a
todos los funcionarios y al mismísimo jefe comunal que “no hay ni un peso”.
En
ese sentido, el pasado viernes, personal del Centro Integrador Comunitario del
Barrio San Carlos (CIC), expuso su crítica situación al director de Salud, doctor
Sebastián Adler, quien respondió que “hay que tener paciencia porque ya van a
cobrar”. Por supuesto, no satisfizo a los empleados que tienen contrato de
locación, quienes preparan una movilización para los próximos días.
Proveedores
molestos
Por
otra parte, la municipalidad bandeña tiene que hacer frente a una deuda muy
grande que dejó la gestión del ex intendente Héctor Eduardo “Chabay” Ruiz. Tal
es así que los proveedores llevan hasta seis meses sin cobrar y muchos de ellos
están optando por dejar de proveer para evitar que la deuda continúe creciendo
y se “haga más difícil cobrar”.
Los
expedientes recorren los pasillos cubriendo el circuito administrativo, pero
cuando llegan al sector de Economía, la secretaria del área, Ana María Jorge de
Habra, es contundente y asegura que ella no se va hacer cargo de las deudas que
dejaron “otros”.
Mirolo con funcionarios
Como
una manera de buscar respuestas al acuciante momento que atraviesa la comuna,
el intendente Mirolo convocó a todos los funcionarios y les pidió que “utilicen
bien los pocos recursos que tenemos, porque estamos viviendo un momento muy
complicado”.
El encuentro duró un poco
más de una hora y los funcionarios terminaron convencidos de que “no
encontramos ninguna solución. Es que se necesita plata, no palabras”, expresó a
Arena Política un allegado a Mirolo.
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